Por Hipólito Molina de Colectivo Voces de la Tierra
Respecto al gaseoducto que se pretende instalar por parte de la Comisión Federal de Electricidad, atravesando por comunidades de Puebla, Tlaxcala y el Estado de Morelos, ha resultado un acto de represiones, amenazas y encarcelamiento de personas demandándolos de acusaciones falsas.
Este proyecto de la CFE en complicidad de los gobiernos estatales de Morelos y Puebla, es una más de las evidencias de violación del derecho a la consulta que los pueblos originarios exigen, de decidir sobre su territorio.
Y es que en el caso específico de Puebla están presentes diversos proyectos denominados de Muerte, como las Hidroeléctricas, Minerías y el Gaseoducto.
La exigencia de los pueblos tanto rurales como urbanos o semi-urbanos, es que se detengan los diferentes proyectos ya iniciados y por iniciar.
Si bien es cierto que estos proyectos generarían una derrama económica en las comunidades afectadas, también es cierto que las afectaciones sociales, medioambientales culturales y a la salud humana no se compensan con dinero.